Ejemplo de la Temática Escape para Vender por Internet

Para entender mejor cómo funciona la temática del Escape, veamos un ejemplo sobre la ley de la atracción o Secreto, que he obtenido del sitio web heathermanifestation.com.

Hay algunas cosas que necesitas saber acerca de quién soy. Y por qué el Secreto funciona tan bien para las personas que lo usan.

Es muy personal. Sin embargo, es la única manera en que puedo compartir la verdad acerca de este increíble secreto contigo. Así que permíteme comenzar.

No siempre fui una coach motivacional y una experta en aumentar la energía vital del cuerpo. De hecho, hace solo unos pocos años atrás, estaba viviendo dos vidas.

Una mujer que, vista desde afuera, parecía tenerlo todo: un gran trabajo donde ganaba más dinero que todos sus amigos, una feliz relación con un apuesto y joven emprendedor exitoso, una nueva casa en una gran zona de la ciudad, amigos, una buena vida social, buena salud.

Ahora, toma a esa misma mujer y ponla bajo una medicación para la ansiedad y la depresión, hazla trabajar 60 horas a la semana, ponle algunas arrugas entre sus ojos a causa del ceño fruncido todo el tiempo…

… hazla despertarse cada mañana con una profunda sensación de ansiedad y dolor en los músculos de la mandíbula por rechinar los dientes toda la noche, hazla preocuparse acerca de su peso y pasar cada fin de semana sintiéndose cansada y agotada…

… entrégale una deuda de 18 mil dólares y una relación que parece feliz pero que se cae a pedazos de tanto estrés y cero alegrías. Esa mujer era yo tan solo hace 12 meses atrás.

Tenía un trabajo decente y trabajaba duro. De chica me enseñaron que las cosas buenas les llegan a aquellos que se rompen el trasero trabajando. Y que las oportunidades vienen disfrazadas de trabajo duro.

Así que eso fue lo que hice. Trabajé. Luché. Pero por dentro todavía sentía como que algo faltaba. Algo de vital importancia que no podía identificar porque no importaba lo mucho que trabajara, simplemente no podía avanzar.

No quería ser Donald Trump. Pero estaba harta de trabajar como esclava para ganar hasta el último centavo. Estaba cansada de entregar el mil por ciento en el trabajo todos los días y me molestaba profundamente el no poder deshacerme del estrés laboral y las preocupaciones de dinero que azotaban mi cabeza todas las noches.

Y lo que más me volvía loca era el hecho de mirar alrededor y ver a otras personas trabajando menos que yo, pero aun así teniendo más cosas.

Un ejemplo lo era Megan, mi jefa en aquel momento. Ella tenía tres empresas. Y cualquiera pensaría que debería trabajar 80 horas a la semana como una esclava.

Sin embargo, mientras yo trabajaba los fines de semana hasta la noche tarde, ella apenas parecía trabajar. De hecho, ella en realidad parecía disfrutar de la vida. El dinero y la felicidad simplemente parecían fluir hacia ella. Y siempre parecía tener más que suficiente.

Se sentía tan injusto. Intentaba no ser resentida. Pero no podía evitar preguntarme cómo es que algunas personas están viviendo vidas de abundancia mientras que yo me estoy esclavizando para ganar algunas migajas.

No quería ser millonaria o vivir como una loca heredera como Paris Hilton. Pero es que simplemente sentía que no era justo que me sucediera eso.

Así que un día me acerqué a mi jefa después del trabajo y le rogué que me dijera su secreto. Ella se rio y me dijo: “Heather, no me creerías si te lo dijera.”

Pero esta oportunidad que tenía no la iba a dejar pasar. Tenía que saber cuál era su secreto así podía usarlo en mi vida de la misma forma en que ella lo usaba en la suya. Así, finalmente con una leve sonrisa me dijo: “Espera aquí.”

Fue hasta su oficina, revolvió en un cajón y volvió con un libro. “Es bastante famoso. Seguramente has escuchado sobre él”, me dijo refiriéndose al libro.

El libro era sobre la ley de la atracción y cómo usar el poder de la manifestación para obtener la vida que quieres.

Luego me dijo: “Heather, lo único que debes hacer es leer este libro de principio a fin y hacer exactamente lo que dice.”

Ahora, soy por naturaleza una persona muy escéptica y definitivamente no tengo tiempo para cosas místicas e imaginar que todo va a salir bien. Pero qué tengo que perder me dije. Así que leí el libro y luego seguí las instrucciones paso a paso.

Pasaron tres meses. Luego seis meses. Estaba siguiendo todas las instrucciones al pie de la letra. Sin embargo, nada sucedía. Y cada día estaba más y más estresada mientras que otros alrededor mío se volvían ricos haciendo menos trabajo.

Fui con mi jefa y le dije: “Megan, hice lo que me dijiste y no está funcionando. ¿Qué estoy haciendo mal?” Ella me hizo un par de preguntas para asegurarse de que lo esté haciendo bien. Y cuando terminamos, Megan estaba desconcertada. “No sé por qué no está funcionando”, me dijo. “Lo siento Heather. Sinceramente no sé. Quizás necesites esforzarte más.”

Sentí que mi cabeza iba a explotar de la frustración que sentía, porque estaba siguiendo las instrucciones perfectamente. Sin embargo, aún no me estaba funcionando.

En mi corazón sabía que estaba muy cerca. Sabía que el poder de la manifestación podría funcionar si lo hacía de la forma correcta. Pero por alguna razón no era capaz de conectar las piezas del rompecabezas y hacerlo funcionar para mí.

Así que pregunté a otras personas que sabía que eran fans de la ley de la atracción. Encontré muchos seguidores de este libro. Me asombré cuando descubrí que muchos de ellos sentían lo mismo que yo.

Ellos también habían creído en la ley de la atracción. Ellos también habían hecho todo lo posible para que funcionara para ellos. Ellos también habían invertido tiempo de sus vidas esforzándose en visualizar, meditar y trabajar para tener éxito. Ellos creían de todo corazón en el poder del universo para cambiar sus vidas para mejor.

Sin embargo, al igual que a mí, nada había cambiado para ellos. Ellos también sintieron que eran unos tontos. Se sintieron decepcionados. Estafados. Y un poco amargados, sintiéndose vacíos por dentro.

Sentía que había llegado a un callejón sin salida. Así que con desesperación, redoblé mis esfuerzos para trabajar duro, ahorrar mucho y llegar a fin de mes.

En el fondo sentí que ésta no era la forma de salir adelante y alcanzar la vida que realmente quería. Sin embargo, no sabía qué otra hacer. Había llegado a mi límite con este tema de la ley de la atracción. Había hecho todo lo que esos malditos gurús decían. Y no había logrado nada.

Sin embargo, muy en el fondo creo que seguía esperando en secreto por un milagro. Seguí estancada varios meses.

Luego, una noche de un miércoles de octubre todo cambió. Estaba tomando café en una tranquila cafetería con mi buen amigo Luke, un experto en desarrollo personal.

Recurrí a Luke porque tiene una gran capacidad para ayudar a las personas con sus problemas y ver dónde está el origen de tales problemas.

Le dije: “Luke, estoy muy cansada de intentarlo. Estoy trabajando muy duro y sin embargo aún no he logrado casi nada. Me he rendido completamente con todo este asunto de la ley de la atracción. En mi caso no está funcionando. Y no sé qué otra cosa hacer para cambiar mi vida. ¿Qué estoy haciendo mal?”

Luke me respondió: “Heather, tuviste la idea equivocada desde el principio. La ley de la atracción es real. Estás en lo cierto sobre eso. Pero hay algo de vital importancia que no estás haciendo. Siempre has creído que mientras más duro trabajes, mejor la recompensa. Te esfuerzas y ahorras para obtener pequeñas recompensas…

… Piensas que la ley de la atracción es sobre esfuerzo y trabajar bastante duro. No te sucede solo a ti. Lo he visto con muchos de mis clientes. Sin embargo, mira alrededor tuyo. Las personas que más trabajan duro por lo general se quedan con lo mínimo. Y aquellos que pueden usar el poder de la manifestación pueden hacer magia con sus vidas.”

Luke tomó un trago de su cerveza y me miró directo a los ojos: “La verdad es que has estado luchando toda tu vida. Trabajas muy duro y mira hasta dónde te ha llevado. Trabajas más y tienes menos que muchas personas que hacen menos que tú…

… La verdad es que muchos de esos expertos que tienen éxito con la ley de la atracción son simplemente Naturales. Ellos lo logran sin siquiera darse cuenta que están usando la ley de la atracción. Pero personas como tú y yo somos diferentes. Necesitamos el ingrediente mágico que los Naturales ni siquiera saben que lo tienen.”

“Si realmente crees eso, ¿por qué no me lo dijiste antes?”, le dije enojada. “Me estuve rompiendo el trasero trabajando. Me maté esforzándome lo más que podía para hacer funcionar esta estupidez de la ley de la atracción. Así que, si sabes algo, no entiendo por qué diablos no me lo dijiste antes.”

Yo estaba realmente enojada. ¿Por qué me estaba ocultando algo como eso? Pero luego se acercó, agarró mi mano y la apretó suavemente:

“Si te lo hubiera dicho antes, no lo habrías entendido. Primero tenías que intentarlo a tu manera y probar que esforzarse, estresarse y trabajar para lo que deseas no te lleva a ninguna parte…

Pero si te lo digo ahora, realmente me escucharás. Ahora estás lista para hacer lo que funciona porque has intentado todo lo demás. Entonces, si puedes prometerme que estás lista para dejar todo lo que creías saber sobre lo que realmente se necesita para usar el poder de la manifestación correctamente y si realmente estás lista para comenzar a obtener lo que realmente quieres, entonces esto es lo que necesitas hacer.”

Se tomó unos 10 minutos y me explicó todo. Sinceramente sentí que estaba hablando con alguien que lee la mente. Lo que me estaba diciendo era tan simple, sin embargo sentí que podría funcionar y, por primera vez en mi vida, comencé a ver lo que había estado haciendo mal y cómo estas “cosas de la abundancia” realmente podrían funcionar para mí.

Luke se concentró exactamente en lo que había estado haciendo mal con la ley de la atracción. Explicó por qué hice lo que hice. Explicó por qué los consejos de los expertos casi nunca funcionan para personas comunes como tú y yo. Explicó lo que había pasado por alto. Por qué me lo había pasado por alto. Y lo más importante, me dijo lo único que necesitaba hacer para que todo comenzara a funcionar para mí de la manera que yo quería y que también necesitaba.

Todo se reducía a una simple técnica psicológica que pocos conocen, y mientras él hablaba, instintivamente sabía que esta técnica funcionaría en cualquier situación.

Es lo único que necesitas para atraer lo que más quieres en la vida. Y cuando sabes cómo tener el poder de esta ley de tu lado, puedes construir tu propia vida.

Esta increíble técnica de Luke fue honestamente lo mejor que me pudo haber pasado, porque enseguida supe exactamente lo que tenía que hacer. Instintivamente lo entendí y con una oleada de energía y emoción, de repente no podía esperar para poner en práctica mis conocimientos recién descubiertos.

Inmediatamente comencé a usarlo en secreto en mi vida y me sorprendió lo rápido que empezaron a suceder las cosas. Primero comencé a usarlo en las cosas pequeñas.

Luego comencé a usarlo en las cosas grandes y no podía creer lo rápido que todo comenzó a cambiar para mí. Empecé a experimentar el éxito como nunca antes

Instintivamente, las situaciones que siempre me habían parecido difíciles simplemente encajaron. Las soluciones, la gente, el apoyo y el dinero que necesitaba acababan de aparecer en mi vida, casi tan fácil como recibir cheques por correo.

Este secreto funcionó siempre casi sin falta. Y con cada nueva oportunidad y buena decisión que se me presentaba, mi poder para manifestar lo que quería se hacía cada vez más fuerte.

Finalmente sentí que todas las puertas se estaban abriendo en mi vida, puertas que una vez creí que estaban cerradas para siempre.

Intuitivamente, sabía que había descubierto una enorme fuerza universal invisible, la mayor fuente de poder de la historia. Y por primera vez, el dinero y la abundancia comenzaron a llover en mi vida.

Y toda mi vida se transformó en algo completamente mágico. Mis amigos y mi familia comenzaron a notar algo diferente en mí.

Al principio no pudieron entender lo que estaba sucediendo. Pero finalmente ya no pudieron contenerse: “¿Qué te pasó, Heather?” Me preguntaron. “¿Cómo estás haciendo todo esto? ¿De dónde viene todo este dinero? ¿Qué está pasando contigo?”

Sé que el ejemplo ha sido muy largo. Pero era necesario para que puedas notar las tres partes que debe contener una historia de escape.

En la primera parte, Heather describe lo miserable que es su vida e intenta “escapar” pidiéndole ayuda a su jefa y aplicando la ley de la atracción. Pero no tiene éxito y vuelve a su vida normal para seguir trabajando duro.

En la segunda parte de la historia, ella toma la firme decisión de que depende solo de ella escapar. Así que decide volver a intentar, esta vez con la ayuda de Luke.

Y en la tercera parte, Heather describe cómo aplicando esa técnica mágica logró escapar de su vida miserable y atraer todo aquello que quería.